Comida de calidad.
Gimnasio.
Ir al fisio.
Hacerte una limpieza facial.
¿Gasto o inversión?
Cochazo de gama alta.
Móvil de última generación.
Ropa de marca.
Muebles de diseño.
¿Gasto o inversión?
Vivimos en la era de la inmediatez y de la apariencia.
Es la era del postureo.
Lo importante es PARECER (aunque luego no SEAS).
Y esto nos hace que el CORTO PLAZO gane al MEDIO Y LARGO PLAZO.
Sin duda, para mí cualquier cosa relacionada con salud es INVERSIÓN.
Inversión en calidad de vida.
Inversión en felicidad.
Inversión en bienestar.
Inversión en independencia.
Sin SALUD no somos nada.
Aunque conduzcamos el mejor coche.
Aunque tengamos el Iphone de último modelo.
Aunque vistamos de Gucci.
Aunque vivamos en una casa como la de María Pombo.
Para esto, esta semana te propongo un ejercicio un poco distinto.
Abre la app del banco.
Coge boli y libreta.
Revisa los gastos de los últimos 3 meses.
En una columna, apunta tus gastos fijos e innegociables (¡maldita inflación!)
En otra columna, apunta aquellos gastos “prescindibles” a tus ojos y valóralos uno a uno.
¿Los consideras un gasto o una inversión?
¿Te acercan a tus objetivos a medio y a largo plazo?
¿Qué relevancia tienen en cuanto a tu salud?
¡Cuéntame tus sensaciones! ¡Estoy segura que te sorprenderás!
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